lunes, 8 de mayo de 2017

EL CAPITALISMO MONOPOLISTA, (Imperialismo).

                                                                                                             
        





República Bolivariana de Venezuela
Ministerio del Poder Popular para la Educación Universitaria
Instituto Universitario de Tecnología de Estado Bolívar
PNF Ingeniería en Mantenimiento
Unidad Curricular: Formación Socio-Política
Sección: X-MTTO-1M/2M
Cuidad Bolívar - Estado Bolívar




EL CAPITALISMO MONOPOLISTA,
(Imperialismo).









PROFESORA:                                                                INTEGRANTES:                                                                             
Karla Yanez                                                                      Chiraspo, Ana
                                                                                         C.I: 25.361.407
                                                                                         Flores, Griselle
                                                                                         C.I: 26.397.532
                                                                                         Lugo, Gabriela
                                                                                         C.I: 25.849.509
                                                                                         Torres, Mariana
                                                                                          C.I: 25.080.957




Ciudad Bolívar,  Mayo de  2017




Características del imperialismo

El fenómeno imperialista presento diversos rasgos, entre los que se destacan:

  • Fue desarrollado por las principales potencias industrializadas europeas, como Gran Bretaña, Francia, Bélgica y Alemania, sobre Asia, África e islas del Pacifico.
  • Funciono a manera de proyectos empresariales privados, es decir, grandes compañías que buscaban negocios rentables y que contaban con el respaldo de sus gobiernos los cuales les brindaban apoyo militar para imponerse a la población nativa.
  • La colonización fue realizada por una minoría de europea mediante una ocupación rápida y planificada de los territorios en los cuales se establecían actividades como la agricultura.
  • Se convirtió en factor generador de fuentes luchas entre las potencias por el control de las colonias, presentándose varios conflictos entre distintas potencias coloniales europeas.
  • Las navegaciones para tratar de resolver estos conflictos también estuvieron a la orden del día. Gran Bretaña y Rusia por ejemplo, acordaron respetar sus áreas de intereses en Afganistán y Persia.
  • Dominio político y económico de una nación poderosa sobre otra más débil.
  • La concentración de la producción y del capital llega hasta un grado tan elevado de desarrollo, que crea los monopolios, los cuales desempeñan un papel decisivo en la vida económica.
  •  La fusión del capital bancario con el industrial y la creación, sobre la base de este “capital financiero”, de la oligarquía financiera.
  • La exportación de capitales, a diferencia de la exportación de mercancías, adquiere una importancia particularmente grande.
  •  Formación de asociaciones internacionales monopolistas de capitalistas, las cuales se reparten el mundo.
  • La expansión económica e industrial del capitalismo monopolista.


El paso al imperialismo

     El imperialismo no es un modo de producción diferente al capitalismo, es solo su etapa más avanzada. El imperialismo se refiere a todo tipo de dominio político y económico que ejerce una nación poderosa sobre otra más débil, la cual se convierte en colonia de la metrópoli imperial; sin embargo, a lo largo de la historia sean transformado las características de este fenómeno mundial, de acuerdo con las circunstancias socioeconómicas y culturales propias de cada momento y de cada potencia imperialista en particular. En el contexto de la Segunda Revolución Industrial, el imperialismo se manifiesta principalmente a partir del último tercio del siglo XIX, cuando las economías capitalistas europeas experimentan un proceso de concentración monopolista.

     Este tipo del imperialismo que, iniciado a fines del siglo XIX, cubre un periodo de casi cien años, surgió en relación con la gran expansión económica e industria del capitalismo monopolista, y constituye una nueva forma de explotación colonial que no obstante distinta a la que se diera durante la etapa mercantilista, en esencia se trata en ambos casos de una relación desigual entre metrópoli y colonias.

       La principal diferencia entre ambos sistemas se da en el aspecto económico, y consiste en la revolución industrial que media entre una y otra época, transformando los requerimientos de las potencias capitalistas bajo condiciones de dependencia. Así, por tratarse de una nueva forma de colonialismo, el imperialismo del periodo 1870-1914 recibe también el nombre de neocolonialismo.



Los monopolios y el libre mercado 

Los monopolios bancarios y el nuevo papel del banco

     Cuando la concentración de la producción se acentuó aún más y los monopolios adquirieron significado decisivo en la vida económica. Fue precisamente en esta etapa en que el capitalismo industrial se convirtió en imperialismo.

      Tres rasgos esenciales componen la esencia del monopolio: a) concentración en sus manos de una gran parte de la producción que le asegura una situación dominante en una o varias ramas de la economía; b) posibilidad de imponer dentro de ciertos límites los precios en el mercado; c) apropiación de una alta ganancia de monopolio como forma de realización económica de su dominio.

      La demanda de los monopolios en cuanto a la inversión de capitales era casi imposible de ser satisfecha por un solo banco, de ahí que se impulsó también una concentración y centralización, pero esta vez en la circulación bancaria, por medio del crecimiento del capital propio, a través de la acumulación de parte de las ganancias. Fue de esa manera que pudieron responder a las necesidades de los monopolios., mediante el otorgamiento de grandes créditos y a largo plazo.

       El aumento de la demanda de crédito por parte de la industria, originó una lucha competitiva en el capital bancario. Los más débiles eran desplazados por los más fuertes o eran absorbidos por estos. Todo ello condujo a la concentración del capital de préstamo en un número reducido de grandes bancos, lo cual se erigió en base del surgimiento de los monopolios bancarios.

    Los bancos entonces cambian su papel. Antes de que ocurriera el fenómeno descrito, los bancos servían de intermediarios en las operaciones de pago. Recibían depósitos de capital monetario inactivo, a ingresos de otras clases sociales en forma de dinero, convirtiéndolo en capital monetario activo, contribuyendo a reducir el mínimo el capital necesario para la circulación del capital social, creando estímulos que facilitan la circulación monetaria a través de billetes de banco, letras de cambio, pagarés, etcétera.

      Este papel contribuyó a la concentración y centralización del capital monopolista industrial, pero además, por el poder que adquieren estos monopolios bancarios, estos quedan en condiciones de controlar y conocer, la producción exacta de las grandes industrias que financian, ejerciendo poder sobre ellas. Comienza existir entonces una dependencia entre el capital bancario y el industrial, dando lugar incluso, a relaciones de copropiedad entre uno y otro monopolio, y originándose el capital financiero.

La oligarquía financiera mundial

      Los bancos, que son empresas capitalistas que se dedican a prestar dinero a interés a los industriales, comerciantes y latifundistas y a financiar operaciones de tipo especulativo, también empiezan a formarse monopolios a fines del siglo XIX. Llegan a ser tan importantes que ellos determinan a quienes deben o no conceder créditos. Los bancos compran acciones de los monopolios industriales y estos adquieren acciones de los bancos. Se produce así, a comienzos del siglo XX, la unión del capital bancario e industrial, dando nacimiento al capital financiero. La capa de la burguesía que controla este capital se llama oligarquía financiera, debido a su gran poderío económico. Esta oligarquía financiera entra en contradicción con los pequeños y medianos empresarios no monopólicos.

       La oligarquía financiera era un grupo reducido de grandes capitalista financieros que poseen monopolios industriales y bancarios.

Imperialismo, fase superior del capitalismo

De acuerdo a N. Lenin:

    El imperialismo es la fase monopolista del capitalismo, esta definición comprendería lo principal, pues por una parte, el capital financiero es el capital bancario de algunos grandes bancos monopolistas fundido con el capital de las alianzas monopolistas de las industrias, y por otra, el reparto del mundo es el tránsito de la política colonial, que se extiende sin obstáculos a las regiones todavía no conquistadas por ninguna potencia capitalista, a la política colonial de dominación monopolista de los territorios del globo enteramente repartidos.

 Cincos rasgos fundamentales del monopolio en el imperialismo

1.    La concentración de la producción y del capital llega hasta un grado tan elevado de desarrollo, que crea los monopolios, los cuales desempeñan un papel decisivo en la vida económica.

2.    La fusión del capital bancario con el industrial y la creación, en el terreno de este “capital financiero”, de la oligarquía financiera.

3.    La exportación de capitales, a diferencia de la exportación de mercancías, adquiere una importancia particularmente grande.

4.    Se forman asociaciones internacionales monopolistas de capitalistas, las cuales se reparten el mundo.

5.    La terminación del reparto territorial del mundo entre las potencias capitalistas más importantes. El imperialismo es el capitalismo en la fase de desarrollo en que ha tomado cuerpo la dominación de los monopolios y el capital financiero, ha adquirido señalada importancia la exportación de capitales, ha empezado el reparto del mundo por los trusts internacionales y ha terminado el reparto de toda la tierra entre los países capitalistas más importantes.

La exportación de capitales y la dependencia económica

     Los grandes países capitalistas se dedicaban a la exportación de mercancías, especialmente productos manufacturados. Con el dominio de los monopolios financieros pasa a ser más importante la exportación de capitales. Con el fin de dar salida a la gran cantidad de capital acumulado y para lograr obtener la máxima ganancia, los monopolios, invierten capitales en otros países, construyendo grandes empresas, fundamentalmente de extracción de materias primas, en una primera etapa. Así logran obtener mercancías a costos muy bajos, debido a que la mano de obra es mucho más barata en estos países. Al mismo tiempo aseguran el control de las fuentes productoras de las materias primas necesarias para la producción industrial de las metrópolis.

     Otra forma de exportación de capitales es la concesión de préstamos y la llamada “ayuda económica” a otros países. Los intereses que cobran por este dinero son riquezas extraídas a estos pueblos, son recursos que se restan a la economía del país dependiente y constituyen un verdadero saqueo. Además, estos préstamos y esta “ayuda” son utilizados para presionar políticamente al país deudor.

       Los países de América Latina son independientes políticamente desde la primera mitad del siglo XIX, y cada día son más los países de Asia y África que logran romper con el sistema colonial, pero esta independencia es en gran medida formal. Detrás de esta situación de aparente independencia se esconde una dominación política que surge y se mantiene a través de la dependencia económica. Esta dominación toma formas menos directas que en los países coloniales, pero es igualmente efectiva y, cuando las condiciones lo requieren, se manifiesta directamente sin necesidad, de ningún disimulo. Ella va desde simples concesiones económicas que logra el capital extranjero a través de su influencia en los gobiernos de los países subdesarrollados, hasta la intervención directa cuando los pueblos amenazan con poner en peligro el sistema de dominación imperialista.

    En general, los países imperialistas hacen préstamos y conceden “ayuda económica” a los países donde han logrado determinadas ventajas económicas que expresan una dominación política indirecta de los gobiernos de esos países:

·         Reducción o supresión completa de las disposiciones que puedan entrabar la importación de mercancías.

·         Igualdad de derechos entre los monopolios extranjeros y los capitalistas de esos países.
·         Autorización para exportar las ganancias.

·         Atribución o prolongación de concesiones a estos monopolios extranjeros para explotar los recursos mineros, agrícolas, ganaderos, etc.

·         Establecimiento de tratados comerciales que facilitan la penetración del capital transnacional en estos países garantizándole ganancias elevadas.

Las transnacionales´

     Una de las características del imperialismo en la época actual es la existencia de las grandes corporaciones trasnacionales. La concentración monopólica ha llegado a constituir empresas gigantes con innumerables filiales en las más diversas partes del mundo.

      En la época analizada por Lenin la exportación de capitales se dirigía principalmente a los países coloniales, sólo asumía, en parte la forma de inversión directa y las empresas creadas en los países hacia donde se exportaba el capital eran unidades empresariales más bien autónomas y no como ahora: una parte de la estructura orgánica de la firma matriz.

      Por otra parte, las empresas trasnacionales se funden con las economías de los países hacia donde se desplazan. En lugar de constituir enclaves industriales dentro de estos dedicados a producir materias primas para el mercado externo, producen cada vez más, junto a estas materias primas, productos manufacturados para el mercado interno y se articulan profundamente con la estructura productiva del país donde se instalan.


El fin de la división territorial del mundo

     Según Lenin, la etapa imperialista del capitalismo se caracteriza, por el hecho de que los países capitalistas ya han terminado por conquistar todas las tierras no ocupadas de nuestro planeta y, por lo tanto, por primera vez el mundo se encuentra ya repartido entre las grandes potencias. Esto no significa, sin embargo, que ese reparto deba mantenerse intocable. No, como hemos visto anteriormente, esto no ocurre; la competencia interimperialista lleva constantemente a nuevos repartos del mundo. En este caso ya no se trata del paso de un territorio sin propietario a un “dueño”, sino del paso de territorios de un propietario a otro. La lucha monopolista internacional se hace particularmente aguda.

      Y Lenin concluye que no cabe duda que en esa etapa imperialista existe una socialización tal de la producción que hace cada vez más inadecuada su envoltura, la propiedad privada, y que esta terminará, por ser suprimida aunque permanezca en estado de descomposición por un período todavía relativamente largo.

Crisis general del capitalismo

El problema de los mercados

El problema del desempleo y las migraciones

     En las últimas décadas del siglo XIX, se manifestó en el sistema capitalista un serio periodo de crisis, alternándose los momentos de expansión con los depresión, debido al mecanismo propio de este sistema económico en cuanto a la relación, que no siempre actúa en forma equilibrada, entre producción, precios y salarios, además de que la concentración monopolista había llegado a un nivel muy alta, perjudicando las bases mismas del liberalismo capitalista. Esa crisis económica, que comenzó en 1873 y prosiguió hasta 1895 aunque interrumpida por momentos de recuperación, ha llegado a ser considerada como un punto crucial en la historia del capitalismo por haber puesto fin a la primera etapa de este sistema, caracterizada por un continuo optimismo de los empresarios al suponer que la prosperidad habría de continuar sin tropiezos.

     El proceso de concentración monopolista, al llevar a la quiebra a muchas empresas industriales medianas y pequeñas, aumento considerablemente el desempleo en aquellas sociedades cuya población urbana se encontraba en plena expansión; por otra parte, las empresas monopólicas, al no tener competidores, habían hecho subir los precios de los productos de consumo, y esto redujo el poder de compra de la clase trabajadora e hizo aún más difícil la situación de los obreros desempleados. De esta manera, las naciones industrializadas contaban con exceso de capital que no podían reinvertir, con exceso de producción que no podían colocar en el mercado con exceso de mano de obra calificada que no podían emplear, y con una tecnología cada vez más avanzada que se estaba desperdiciando.

Renacer del socialismo

     Todos los autores que han estudiado y opinan que la Crisis general del capitalismo ha pasado por varias etapas, y mientras más tiempo transcurre mas se van descubriendo o inventado. La tercera etapa se perfila a partir de la segunda mitad de los años cincuenta, cuando tienen lugar importante cambio en la correlación de fuerzas entre el capitalismo y el socialismo, a favor del segundo, y se agravan las contradicciones económicas y sociales del imperialismo.

     Uno de los fenómenos que se “distinguió por el comienzo de la crisis del sistema colonial del imperialismo, que se expresó en el despliegue del movimiento de liberación nacional…” (Rumiantsev et al., 1985:557) y la reducción de la esfera del dominio capitalista a nivel mundial. En la segunda se desplego la emulación económica entre los dos sistemas mundiales y el socialismo creció económicamente más rápido que el capitalismo, lo que aumento la participación de los países socialistas en la producción industrial mundial. La crisis del sistema colonial se transformó en su desintegración. Nuevos países ingresaron al sistema socialista (China, Corea del norte. Vietnam del norte). Por otra parte, aumento la presencia del estado en la economía, creció la desigualdad entre países y ramas, se profundizo el antagonismo entre el trabajo y el capital, recrudeció la inestabilidad económica del capitalismo y se desarrolló aún más el CME en los principales países imperialista. Asimismo se incrementó la militarización de la economía, en particular en Estados Unidos. También proliferaron los movimientos de liberación nacional. Algunos autores (Ac URSS, 1972) constataron en este periodo un crecimiento relativo de los salarios reales en las economías capitalista. Igualmente se habla de una expansión del mercado en estas economías y una modificación de los ciclos económicos, acompañada por una reducción de la profundidad de la crisis. Las fluctuaciones de las inversiones se hacen también las tenues. La explicación de todos estos fenómenos es que la derrota del fascismo por la URSS creo condiciones propicias para la lucha exitosa del movimiento obrero en los países capitalistas.

      Sobre la tercera etapa se dice que el tránsito a ella en “en el segundo lustro de los años 50. Venia condicionado por el continuo cambio de la correlación de fuerzas entre el socialismo mundial y el capitalismo mundial en favor del primero “. Ella se inicia con la aceleración delos métodos de regulación monopólicos-estatal de la economía, que es la respuesta del capital ante el desafío del socialismo. Esta etapa no se origina en relación con guerras mundiales, sino en condiciones de coexistencia y de emulación económica entre el capitalismo y el socialismo. Al mismo tiempo suceden procesos de integración económica en Europa occidental. Viene una ola de fusiones para mejorar la regulación y para elevar la capacidad de competencia en el mercado mundial. Surgen grandes complejos agroindustriales, se verifican fusiones de firmas de distintos países. En esta etapa Estados Unidos tiene que ceder parcialmente su hegemonía a sus concurrentes fortalecidos ubicados del otro lado del atlántico. En este contexto se precipita el derrumbe de los viejos imperios capitalista coloniales, surgen nuevos estados africanos y triunfa la revolución cubana. (AC URSS,1972: 13-45).


EL CAPITALISMO MONOPOLISTA O IMPERIALISMO
(Análisis)

Para los economistas marxistas el capitalismo monopolista es el estadio de desarrollo del capitalismo que correspondió aproximadamente al último cuarto del siglo XIX y que alcanzó plena madurez después de la Segunda Guerra Mundial, el estadio que había de conducir inexorablemente al derrumbamiento del sistema y al advenimiento del comunismo, después de un período transitorio de dictadura del proletariado. El imperialismo surge como consecuencia lógica de la Revolución Industrial y la nueva economía capitalista. Las causas del imperialismo fueron diversas, pero entre los motivos que llevaron a dicha expansión están: La existencia de dos formas de vida diferentes: los estados imperialistas, dominadores, y los territorios dominados, las colonias junto con el excedente de población europea que necesitaba trabajo y que lo encuentra en las colonias. El Imperialismo se convirtió, pues, en una doctrina sólida basada en un sentimiento de superioridad y supremacía de la raza blanca.

El término economía de libre mercado es utilizado como un término descriptivo de los sistemas económicos en un territorio particular, usualmente un estado-nación. Monopolio Es una situación de privilegio legal o fallo de mercado, en el cual existe un productor (monopolista) oferente que posee un gran poder de mercado y es el único en una industria dada que posee un producto, bien, recurso o servicio determinado y diferenciado. Para que exista un monopolio es necesario que en dicho mercado no existan productos sustitutos, por lo tanto, es la única alternativa que tiene el consumidor para comprar. Tres rasgos esenciales componen la esencia del monopolio: a) concentración en sus manos de una gran parte de la producción que le asegura una situación dominante en una o varias ramas de la economía; b) posibilidad de imponer dentro de ciertos límites los precios en el mercado; c) apropiación de una alta ganancia de monopolio como forma de realización económica de su dominio. El objetivo de los monopolios es asegurar la ganancia de monopolio sobre el capital invertido por los magnates capitalistas más grandes.

Con el desarrollo industrial, así como con la centralización y concentración de la producción y el capital da origen a los monopolios se hace indispensable que grandes bancos financien estas grandes empresas. La demanda de los monopolios en cuanto a la inversión de capitales era casi imposible de ser satisfecha por un solo banco, de ahí que se impulsó también una concentración y centralización, pero esta vez en la circulación bancaria, por medio del crecimiento del capital propio, a través de la acumulación de parte de las ganancias. Fue de esa manera que pudieron responder a las necesidades de los monopolios., mediante el otorgamiento de grandes créditos y a largo plazo. El aumento de la demanda de crédito por parte de la industria, originó una lucha competitiva en el capital bancario. Los más débiles eran desplazados por los más fuertes o eran absorbidos por estos. Todo ello condujo a la concentración del capital de préstamo en un número reducido de grandes bancos, lo cual se erigió en base del surgimiento de los monopolios bancarios. Los bancos entonces cambian su papel. Antes de que ocurriera el fenómeno descrito, los bancos servían de intermediarios en las operaciones de pago. Otra de las formas en que contribuyen los bancos con los monopolios, es a través de la presión que ejercen en todos los países del mundo para aplicar las políticas neoliberales, las cuales posibilitarían la absorción de los países subdesarrollados por los desarrollados.

En la época del imperialismo a la vez que se concentra la producción en empresas colosales y se forman monopolios industriales en íntima relación con dichos fenómenos se amplían los bancos y surgen los monopolios bancarios. El dominio de la oligarquía financiera tiene la particularidad de que los grandes financieros disponen no sólo del trabajo ajeno, sino además, del capital ajeno. Logran establecer semejante control a través del capital en acciones (ver Sociedad anónima) forma de capital que se difunde por todas partes en la época del imperialismo y que proporciona ingentes ganancias a la oligarquía financiera. El dominio de la oligarquía financiera en la vida económica de los países capitalistas se combina y completa con su dominio en la política.

El desarrollo de los monopolios trajo, en los países imperialistas, la formación de un “excedente” relativo de capital monetario y la necesidad de su exportación. Este capital es “sobrante” no en el sentido de que no puede aplicarse en el país propio, sino que su inversión en otros países reporta más ganancias a los monopolios. En los inicio del siglo XX la posibilidad de exportación de capitales aumentó. Todos los países integraban el sistema de economía capitalista mundial; se habían tendido o se estaban propagando los ferrocarriles, los que permitía llevar más rápidamente las materias primas a los puertos; los veleros fueron sustituidos por buques de vapor; pasó a ser más rentable el transporte de cargas masivas a grandes distancias. La exportación de capitales adquirió una relevancia particularmente grande, se convirtió en un fenómeno típico, en una de las características económicas más importante del imperialismo. Al mismo tiempo, fue creciendo el comercio internacional capitalista.

En pocas palabras El imperialismo puede ser resumido brevemente en cinco aspectos que son descritos a continuación: 1) La concentración de la producción y el capital llevaron a un alto grado de desarrollo de los monopolios creados, que desempeñan un papel decisivo en la vida económica. 2) La fusión del capital bancario con el industrial y la creación, basada en el capital financiero, de la oligarquía financiera. 3) la exportación de capitales, a diferencia de la exportación de bienes. 4) la formación de asociaciones internacionales de capitalistas monopolistas que se reparten el mundo entre sí. 5) la división territorial entre las potencias mundiales importantes. La concentración de la producción y del capital y la generación de monopolios.

            Cabe destacar que este capitalismo monopolista o imperialismo así como surgió también  presento una crisis general, la cual constituye el periodo histórico “de derrumbamiento del capitalismo en toda su extensión y de alumbramiento de la sociedad socialista” (V. I. Lenin). El régimen burgués se halla en esta situación hace ya aproximadamente medio siglo. A diferencia de la crisis económica de superproducción, que surge periódicamente y que el capitalismo supera mediante sus fuerzas internas en el marco de la sociedad burguesa, aunque pasado cierto tiempo se presente una nueva crisis, la crisis general del capitalismo una vez iniciada prosigue y proseguirá ininterrumpidamente hasta que el sistema capitalista de economía se liquide en todo el mundo como resultado de transformaciones revolucionarias y en su lugar se instaure el sistema socialista mundial de economía. El rasgo principal de la crisis general del capitalismo estriba en que el mundo se halla escindido en dos sistemas sociales opuestos: el socialista y el capitalista. Como quiera que la crisis general del capitalismo abarque un largo período histórico, durante este tiempo tiene lugar un doble proceso. Por una parte, mediante la revolución socialista, los países se van desprendiendo, uno tras otro, del sistema capitalista mundial, el capitalismo se va debilitando, se reduce la esfera en que el capital domina, aumentan y se ahondan todas las contradicciones del sistema capitalista de economía mundial, a la vez que se acentúan los aspectos reaccionarios de este sistema social agonizante y en descomposición.

El imperialismo ha perdido definitivamente y para siempre el dominio absoluto que del mundo había tenido, la correlación de fuerzas entre los sistemas socialista y capitalista ha cambiado radicalmente en favor del socialismo y en perjuicio del capitalismo. El haberse liquidado el régimen capitalista en un gran número de países, el desarrollo y la consolidación del sistema socialista mundial, la desintegración del sistema colonial y el hundimiento de los viejos imperios, la ruptura, ya iniciada, de la estructura colonial que presentaba la economía de los países liberados del imperialismo, la ampliación de los nexos económicos entre estos países y el mundo del socialismo, todo ello hace más profunda la crisis de la economía capitalista mundial.



Referencias Bibliográficas

Delgado De Cantu, Gloria M. “el mundo moderno y contemporáneo I de la era moderna al siglo imperialista”. Quinta edición. Editorial Pearson Educación. México, 2005.
Carlos Maya Ambia “Iluciones y Agonias de los nieros (Teoricos) de Lenin”. Editorial siglo veintiuno editores, s.a. de c.v, mexico 1994
Publicado por tatiana 
http://imperialismonew.blogspot.com/2010/08/caracteristicas-del-imperialismo.html
   
.


No hay comentarios:

Publicar un comentario